Los cantos láser realzan el carácter escultórico de la isla central en un proyecto de arquitectura en Sevilla

Los cantos láser realzan el carácter escultórico de la isla central en un proyecto de arquitectura en Sevilla
La pieza central de la cocina diseñada por Francesc Rifé y bulthaup Marbella a orillas del Guadalquivir en Sevilla, un monobloc bulthaup b3 en laminado blanco mate, resulta especialmente grácil debido al extraordinario acabado de los cantos: mediante la técnica de sellado de bulthaup, las uniones son invisibles, creando la impresión de que cada pieza ha salido de un único molde. El carácter escultórico que ello genera no hace más que reforzar el atractivo de una isla que, al reunir las funciones de cocción, preparación y comunicación, era ya la candidata perfecta para convertirse en el centro neurálgico de la gran zona común de la vivienda.
La versatilidad del monobloc
El bulthaup b3 monobloc forma parte de un lenguaje formal reducido a lo esencial. Despojado de todo detalle superfluo, unifica sus diversas funciones en un bloque homogéneo de gran elegancia. Realizado a medida para cada cliente, cada monobloc es una obra única, concebida para satisfacer las exigencias del usuario y ajustarse a las condiciones arquitectónicas del espacio concreto a fin de resultar armónica dentro del conjunto.
En el caso de la vivienda de Sevilla, el propietario quería que los comensales pudieran sentarse alrededor del extremo abierto del monobloc con absoluta comodidad, en sillas en lugar de taburetes, con la superficie a la altura convencional de una mesa de comedor. Así pues, la pieza proyectada por bulthaup Marbella se adaptó perfectamente a sus requisitos, y ahora las sobremesas con vistas al río y a la Maestranza pueden alargarse sin prisas: la comunicación fluye, como fluyen las superficies destinadas a distintas funciones, borrando las barreras entre preparar, cocinar, comer, compartir.